Normativa de pesca

Orden de pesca de Cataluña, hacia la preservación de nuestros ríos

por Chanquete 11 de marzo de 2014 1 comment

Cataluña es sin duda una de las mejores regiones para la pesca deportiva por la variedad de entornos, desde lagunas de alta montaña y ríos de aguas cristalinas a embalses o cursos de amplios y caudalosos como es el final del río Ebro. Todo ello sin dejar a un lado su litoral, desde el delta del Ebro hasta las estupendas zonas rocosas de la costa Brava. Por todo ello es un referente en la pesca y la orden de pesca de Cataluña un documento con muchos detalles a analizar.

Periodos hábiles y cupos

Centrándonos en la trucha, sin duda la especie con más problemas en todo el territorio nacional, la orden no trae muchas sorpresas en cuanto a fechas, cupos o medidas. El periodo normal de pesca va desde el 15 de marzo hasta el 31 de agosto, ambos incluidos con la excepción de las zonas de pesca controlada sin muerte y zonas libres sin muerte incluidas en aguas de baja montaña, se permite la pesca hasta el 15 de octubre. En los lagos que se hielen, solo se puede practicar la pesca cuando la superficie deshelada sea superior al 90%.

Respecto a los cebos, a diferencia de otras comunidades, se sigue manteniendo la práctica de mosca ahogada, autorizando el buldó con un máximo de 3 moscas por línea. También se permite el uso de cebos naturales siempre que formen parte de la dieta natural de los peces como lombrices de tierra, moscas adultas, frigánidos, gusanos de funda, gusanos de riera, dragas, perlas, grillos o el clásico saltamontes

Los cupos son los normales en estos tiempos, incluso mayores si lo comparamos con otras regiones. La orden de pesca de Cataluña establece cuatro ejemplares por pescador y día en las zonas de pesca controlada de salmónidos, con una longitud mínima de 22 cm, cinco ejemplares por pescador y día en las zonas de pesca controlada de salmónidos que limiten con la Comunidad Autónoma de Aragón, con la misma y seis ejemplares desde 19 cm en las zonas de pesca controlada intensiva.

Reserva genética de la trucha

Por supuesto también hay espacio para analizar la situación actual de la pesca y las medidas para preservar nuestros ríos. Ya no es llamativo, por desgracia, que no se permitan la pesca de especies ¿secundarias? de montaña como la madrilla, la bermejuela o el barbo de montaña, pero si indicativo de la debilidad de nuestros cauces. Y todo ello a pesar de ser una de las Comunidades Autónomas donde más esfuerzo se ha realizado para preservar la riqueza genética de los ríos.

Además de las zonas vedadas, denominadas como Refugio de pesca, desde hace años hay otras zonas especiales denominadas Reservas Genéticas, que son las aguas habitadas por poblaciones de especies autóctonas cuyos individuos presentan características genéticas propias. En estas zonas se prohíben las repoblaciones, excepto las que formen parte de los planes de recuperación (con especímenes propios del río y generalmente con puestas controladas en cajas Vibert). El problema ya no es la falta de peces, sino las repoblaciones sin sentido, que no sólo han sido pan para hoy y hambre para mañana, sino que han hecho un enorme daño a las poblaciones autóctonas. Tenemos las herramientas para salvaguardar muchos de nuestros ríos, trabajemos para ello.

Tenéis más información en la «RESOLUCIÓN AAM/413/2014, de 13 de febrero, por la que se fijan las especies pescables, los periodos hábiles de pesca y las aguas en las que se puede llevar a cabo la actividad de la pesca en las aguas continentales de Cataluña durante la temporada 2014«.