Cada vez más frecuentemente los pescadores a spinning nos encontramos en revistas, catálogos especializados un nuevo artificial revolucionario con el que conseguiremos más y mejores capturas. Algunos suponen una mejora, otros no, lo contrario “empeora nuestro bolsillo” pero si hay algunos tipos de productos que suponen un importante cambio como ocurrió con las cucharilla con vibración (o sonido).
Los que llevamos unos cuantos años en este “negociado” recordamos el lanzamiento de este modelo de cucharilla revolucionario, cuyos sonidos atraería a nuestras presas inexorablemente al anzuelo. Sin ser la panacea, la cucharilla con vibración si supuso una mejora considerable pero en determinadas circunstancias y para determinadas especies.
El modelo vlason de Mapso
El primer fallo que podemos cometer es pensar que la vibración de la cucharilla actúa como una varita mágica y nos olvidamos de la cucharilla en su conjunto. Como hemos hablado varias veces en este blog, a la hora de elegir la cucharilla con vibración ideal influyen otros aspectos como peso, forma o color. Por todo ello es importante optar por gamas amplias como las que nos ofrece Mapso a través de su serie vlason.
Desde las cucharillas más clásicas en colores lisos, como la plata, ideal para los días nublados como otras más fantasía especialmente con un mayor rendimiento para depredadores de mayor tamaño, desde salmón, reo o grandes truchas hasta black bass y especialmente efectiva para luciopercas.
Sacar el máximo partido a la cucharilla con vibración
Las cucharillas con vibración son especialmente recomendable a profundidad, su mayor peso ya ayuda a fondear sin plomadas adicionales y su reclamo, la vibración, es más efectivo a profundizar. Por el contrario en aguas poco profundas, especialmente en los tramos trucheros de montaña es mucho menos efectiva.
Esto no significa que no sea efectiva para la trucha, los clásicos modelos con pintas de color (esencialmente roja) son muy recomendables en tramos bajos y embalses. En estos entornos es donde podemos sacar mejor partido a las cucharillas con vibración. Desde luego podemos atrapar a Lucios, aunque a estos funcionan mejor las ondulantes (especialmente si buscamos los de gran tamaño) pero hay dos especies con las que la vibración es un plus, la lucioperca y el black bass. Para esta última especie son especialmente útiles después del verano, cuando la temperatura del agua baja y buscamos las embestidas de un black bass que sin el apetito de la primavera necesita estímulos adicionales. Por todo ello, no dejamos nuestra cucharilla con vibración y llevemos un buen juego de ellas en nuestra caja de artificiales.
1 Comentario
Participa en la conversaciónmuy buena nota