Pesca a spinning marítimo

La pesca de la palometa blanca a spinning

por Toni Martinez 26 de agosto de 2015 2 comments

Durante los meses comprendidos entre abril y noviembre, una especie se acerca a nuestras costas para desovar y depredar vorazmente sobre bancos de pequeños alevines: la palometa blanca. Un pez valiente, combativo y bonito donde los haya. Vamos a hablar sobre la especie, sus costumbres y su pesca con señuelos artificiales y seguro que en cuanto podáis acercaros al mar, le dedicareis unas horas  a intentar pescarlas.

Conociendo a la especie

La palometa blanca (Trachynotus ovatus) es un Carángido, pariente del gran palometón (Lichia amia) aunque sus tamaños suelen ser bastante más reducidos. Rara vez supera los 50-60cm. y el Kilogramo de peso, pero su fuerza es descomunal, siendo un pez muy deportivo y dejándonos siempre la duda de cómo sería su pesca si alcanzara los 15-20 kg. de peso. Posee el cuerpo ovalado y aplanado por los lados, con una aleta caudal muy bifurcada, que le confiere una gran velocidad y potencia. Su dorso es de coloración gris-plateado con tonos azulados y sus flancos y cara ventral de un blanco muy característico con tonos plateados y algunas manchas ovales negruzcas, de 4 a 6. Las puntas de su segunda aleta pectoral y de las aletas caudal y anal son negras, por lo que también es conocida en algunas zonas como palometa de puntas negras.

Es un pez de aguas cálidas, por lo que habita sobretodo en el Mediterráneo, y en el Atlántico oriental, desde las costas de Guinea hasta (raramente) Vizcaya. Mucho más al norte es una captura rara. Nada preferiblemente en bancos y en aguas profundas, pero se acerca a reproducirse y a alimentarse a desembocaduras, puertos y costas rocosas a poco que pueda alejarse rápido hacia aguas más profundas. Su reproducción se sitúa más o menos por el mes de julio, dependiendo del año y la zona. Se alimenta básicamente de pequeños peces (boquerones y sardinas) a los que persigue con ahínco, ya que son nadadoras extraordinarias. Realmente se conoce poco su biología, siendo una especie algo misteriosa, así que los datos que poseemos los obtenemos en parte gracias a nuestras salidas habituales de pesca y a algunas reseñas en libros especializados. La talla mínima de esta especie son 18 cm.

Palometa blanca a spinning

Metidos como estamos de lleno en el verano, con mucha gente de vacaciones, es una época ideal para su pesca. Nada mejor que hacerlo a spinning, una técnica efectiva y limpia que nos permitirá obtener numerosas y bonitas capturas. Recomiendo un equipo de spinning ligero e incluso de rockfishing, ya que como máximo pescaremos ejemplares de un kilo o poco más y con lo peleonas que son, las disfrutaremos de manera increíble. Así que una caña de 2.10m. o 2.40m. de unos 5-20gr./15-30gr. de acción, con un carrete en tamaño 2500 será el ideal, cargado con un trenzado de máximo 0.12mm. y un bajo de nilón o fluorocarbono de un 0.25mm. aproximadamente. Como señuelos pocos son tan efectivos y polivalentes como un pequeño jig de entre 20-30gr. de peso, que imite a un pequeño boquerón e incluso en coloraciones más estridentes como anaranjadas, rosadas o blancas. Son efectivos los Leppa jig de Seaspin, los Jugulo de Molix y los Bony de Hart.

También son efectivos los pequeños poppers (Sparky de IKR, Glopper de Roshi Lures…), los paseantes en sus tamaños más contenidos (Sammy 65 de Lucky Craft) y los pequeños minnows de no más de 8cm., pudiendo elegir infinidad de modelos dentro del vasto mercado actual. La técnica de buldó es también muy efectiva, ya que el buldó llama mucho la atención de las palometas, que después atacarán a un sugerente anguilón, raglou o pequeña ondulante. Como he comentado, con un equipo de Rockfishing específico y con las mil y una gominolas que encontramos actualmente en el mercado, nos lo podemos pasar aún mejor. Los Sandeel slug de Savagear en sus más pequeños tamaños sacan de sus casillas a las palometas más recelosas.

Por norma general, las animaciones de los señuelos deben ser rápidas, ya que en ocasiones y más cuando no nadan en grandes bancos, son un tanto apáticas (y más si andan con la reproducción) y un señuelo manejado a buena velocidad imprimiéndole algunos tirones, llama mucho su atención, incitándolas  a picar.

¿Embarcados o desde costa?

Al ser una especie que se desplaza mucho y rápido, una embarcación es una excelente opción, y más si en la zona se dan pajareras, llegando con rapidez a todas ellas. Un kayak es otra gran opción, disfrutando de la pesca y el deporte por igual, con la ventaja de poder pescar en total silencio en medio de una buena pajarera, una gran experiencia. Actualmente hay modelos de kayak específicos para la pesca, equipadas con todos los accesorios necesarios para tal fin, y con una estabilidad total y a precios para todos los bolsillos. Galaxy kayaks, con sus modelos Alborán y Cruz, reúnen todas esas cualidades y están creciendo a pasos de gigante en un mundo todavía por explotar. Pero si los nuestro es patear la costa, no hay que desanimarse. La palometa blanca es una asidua de las aguas someras de desembocaduras, espigones, entradas de puertos y algunas zonas rocosas. Será más complicado pescarlas en pajareras si éstas no se dan en plena costa, pero si buscamos zonas de profundidad siempre tenemos más posibilidades y en pleno verano nos las podemos encontrar en cualquier punta de espigón tras la caza de alevines, formando a menudo un buen espectáculo en superficie con escenas de caza muy características, ya que la palometa blanca ataca rápido en superficie dejando ver sus bonitas aletas de puntas negras.

Otras técnicas

Personalmente recomiendo la pesca de la palometa blanca a spinning, pero como las disciplinas de nuestro deporte son muy variadas y para todos los gustos y edades, vamos a comentar otras técnicas igualmente válidas para su pesca. La cola de rata es muy efectiva y deportiva, utilizando pequeños strímers y poppers para hacerlas picar, aunque es una técnica quizás más limitada a embarcación o en zonas de playa como desembocaduras para poder pescarlas más cómodamente. Su pesca con flotador también es muy entretenida y recomiendo entre todas sus facetas, la pesca al coup, para entablar combates más igualados. De cebo, una gusana, un pedacito de sardina salada o una pequeña quisquilla o camarón. Y como no, hay que hablar del surfcasting. No es una especie que entre a una gran variedad de cebos y más si éstos están estáticos en los fondos, pero la sardina es un cebo letal para las palometas, que pierden toda la desconfianza ante su suculento aroma y sabor.  Raramente entran a las gusanas, picando en la mayoría de ocasiones cuando recogemos los cebos y la palometa los ve pasar a velocidad. El curri ligero es también una modalidad muy practicada para la pesca de la palometa blanca, con aparejos de buldó. Es además una técnica muy apta para localizarlas si no conocemos la zona o andan ellas un tanto desperdigadas.

Como hemos visto es una especie apasionante y bella, ideal para pescarla a spinning ligero y pasar una gran jornada de pesca, haciendo las delicias de grandes y pequeños. Es una de mis especies predilectas y sigo emocionándome como un niño cada vez que un animal tan hermoso sale del agua con esos colores tan hermosos. Una pureza blanca de fuerza bruta bajo el agua. ¡Todo un espectáculo!