Embalse de Puentes Viejas un buen lugar para la pesca de barbos a mosca en la Comunidad de Madrid

por Antonio Gallardo 10 de octubre de 2017 0 comments

La pesca en la zona norte de Madrid es cada día más limitada por razones obvias. La combinación de la enorme presión pesquera de un volumen enorme de pescadores en una área de especial protección, donde la administración no ha actuado de forma correcta lleva a que actualmente las zonas de pesca sean limitadas y las que se permite tenga una protección especial. Esto ocurre con el Embalse de Puentes Viejas, el segundo del río Lozoya tras su nacimiento.

Ahora mismo casi todas las aguas de la zona norte se consideran trucheras lo cual lleva a que su pesca se limite a muy pocos meses al año, sobre el papel. En realidad, en la mayoría de los casos estas aguas vieron perder las truchas desde hace muchos años sin que se trabaje para su recuperación. La solución es que en este 2017 (algo que continuará en el 2018), buena parte de estas aguas están vedadas.

Qué ofrece Puentes Viejas

En medio de este área de veda está el Embalse de Puentes Viejas, un lugar en el que antaño se pescaban buenas truchas y que ahora se ha convertido en referente para la pesca a mosca del barbo y carpa, con una población moderada a la que se añaden otras ventajas, como tener orillas accesibles y muchos arroyos que vierten y oxigenan este pequeño embalse.

Se trabaja enormemente para que, en ausencia de truchas, se recupere la población de barbos, que hasta los muros de Riosequillo, el rió madarquillos y otros pequeños arroyos sigue pudiendo remontar para su desove. Estra trabajo proviene de la Asociación de Pescadores Sierra – Norte, cuyas actuaciones, pesca eléctrica y recolocaciones le han convertido en una embalse carpas medias, barbos y con incluso bajadas de bogas y especialmente del río Madarquillos.

El resultado es que las aguas de Puentes Viejas son consideradas actualmente como aguas de pesca controlada, al igual que Riosequillo y aunque los permisos de pesca son más que suficientes (50 permisos en laborables y 80 en sábados y festivos expedidos por la Sociedad de Pescadores Local “Pesca-Sierra Norte”) si hay que tener en cuenta las limitaciones para la pesca. Están permitidas la pesca de 12 carpas y carpines pero para el resto de especie, sólo se permite la captura y suelta, lo que debemos hacer con mucho mimo con nuestros barbos

Última oportunidad en el 2017 para bogas y barbos a mosca

Al ser zona truchera sólo se puede pescar desde marzo a mediados de octubre, considerándose vedado el resto del año. En estos meses, especialmente en primavera y ahora, en el cierre de temporada, son las mejores épocas para la pesca a mosca.

Los equipos deben ser ligeros, ya que aunque el barbo nos sorprenderá por su fuerza, su tamaño no es excesivamente grande. En los lances, con pequeñas moscas entre las que destacan mosquitos negros y hormiga alada tenemos muchas posibilidades de pescar bogas, y lo que es más complicado pero que a veces puede sorprendente, una trucha común.