Pesca en el valle del Lozoya

Pesca en el valle del Lozoya

Pesca en el valle del Lozoya

por 9 de febrero de 2014 0 comments

El valle del Lozoya en Madrid es uno de los lugares más bellos de la Comunidad de Madrid y desgraciadamente de los pocos lugares de esta región en la que aunque escasa, podemos encontrar aún trucha común autóctona. Un paraíso en la que muchos años los pescadores se lanzan a su afición preferida en su arranque de temporada aun rodeándole la nieve de finales de invierno y principio de primavera. Pero además de pesca hay mucho más, ciudades amuralladas, preciosas chorreras que caen hacia el río, monasterios, senderismo, gastronomía y mucho más para disfrutar en familia.

valle-del-lozoya

El valle del Lozoya se encuentra encajonado en por una serie de cadenas montañosas del sistema central, especialmente hasta su tramo medio en Buitrago de Lozoya donde iniciamos nuestra ruta. Al norte, los Montes Carpetanos, que darán paso posteriormente a la sierra de Somosierra, esta cordillera que nace desde Peñalara emblemático pico más alto de la cordillera que divide Madrid y Segovia se eleva generalmente por encima de los 2.000 metros con escasas excepciones como el puerto de Lozoya o Navafría. Todo ello, garantiza una buena dosis de nieve y agua cristalina a nuestro rio. Pero también por el sur, donde se encuentra la sierra de la Morcuera y la Cuerda Larga, que también supera los 2.000 metros de altura. Justamente en la confluencia de las montañas que le dividen de norte a sur, nace este rio que suministra buena parte del agua de tan alta calidad que disfrutan los madrileños. Pero empecemos río abajo.

valle-Lozoya-post

Buitrago de Lozoya, más que historia

Buitrago de Lozoya junto a la autovía que une Madrid con Burgos es una joya de obligada visita. Ciudad amurallada y abrazada por el río  que también le da nombre fue declarada Conjunto Histórico-Artístico y Bien de Interés Cultural desde 1993, y su recinto amurallado es Monumento Nacional desde 1931. Este conjunto amurallado data del siglo XI (época musulmana) pero fue restaurado hasta el siglo XV, tiene dos zonas diferenciadas el adarve bajo junto al río y de menor altura gracias a la defensa natural que facilitaba el Lozoya y el  adarve alto en la zona sur, única no abierta al río, en el que alcanza hasta los 16 metros de altura. Junto a las murallas, el castillo, aunque de influencia musulmana tiene su origen en el siglo XV. Completa el conjunto medieval la Iglesia de Santa María del Castillo del siglo XIV, de la que sólo se conservan original de esta época sus muros exteriores ya que fue destruida al principio de la guerra civil. Pero no es sólo medieval Buitrago, también posee una pequeña joya de arte contemporáneo, su museo Picasso con las obras que reunió y donó al pueblo el que fuera peluquero e íntimo amigo de Picasso, Eugenio Arias Herranz, hijo natural de la localidad. El museo se inauguró el 5 de marzo de 1985 y lo conforma una colección de 60 obras del genial artista.

buitrago-post

 Avanzando por el Valle del Lozoya

Abandonamos Buitrago de Lozoya y la autovía A1 para adentrarnos en el valle del Lozoya por la carretera M-604 que nos acompañará casi toda la ruta. A medida que avanzamos, vemos a la derecha uno de los embalses que concentra este pequeño río (5 en sus tan sólo 91 kilómetros de vida), el de Riosequillo, construido en 1958 y que en su margen derecha alberga desde los años 90 unas piscinas naturales que hacen las delicias de muchos en los días más cálidos del verano. Continuando por la carretera divisamos el bello puente de la antigua línea de ferrocarril Madrid – Burgos y nada más pasar, merece la pena desviarnos. A la derecha sale la carretera M-635 que nos lleva al ayuntamiento de Navarredonda y San Mamés conformado por estos dos pequeños núcleos de población. Desde esta última localidad sale una pista de tierra de 3,5 km que nos lleva a la preciosa chorrera de San Mamés, una cascada de 30 metros sobre el arroyo de Pinilla (afluente del río Lozoya) que vierte sus aguas especialmente abundantes en las semanas del deshielo desde 1.470 metros de altura. En San Mamés también encontramos una quesería artesana en la que comprar su riquísimo queso de cabra.

Volvemos a la carretera M-604 y remontamos el rio hasta el embalse más alto del Lozoya, el de Pinilla, un precioso “lago” entre montañas y pino con zonas de pesca delimitadas. En él, es un espectáculo la freza de las pequeñas carpas “de montaña” que lo habitan, un proceso que por sus aguas gélidas se produce relativamente tarde,  generalmente en el mes de junio. Todas las poblaciones se encuentran en el lado norte del embalse y del río, el primer pueblo que nos encontramos es Lozoya, donde parte una carretera que nos lleva al puerto de Lozoya o Navafría que separa Madrid y Segovia, y que en sus pinares ofrece bellos parajes para el senderismo y una pista para practicar el esquí de fondo. Siguiendo nuestra carretera y desviándonos a la derecha la siguiente población es Pinilla del Valle, ya en la cola del embalse con un puente que nos permite cruzar a la otra orilla del río. Le sigue el pueblo de Alameda del Valle, uno de los rincones más apreciados por los pescadores con un precioso coto para tentar la “pintona”. Valle tranquilo de “lunes a viernes” y con el bullicio de los que huyen del ajetreo de las ciudad en el fin de semana, fue poblado desde hace miles de años, como lo atestiguan los distintos yacimientos del hombre de Neardenthal que han sido encontrados en la zona.

chorrera

Rascafría

Continuando por nuestra carretera el valle se va estrechando y al noroeste ya divisamos perfectamente las montañas más altas de la Sierra Guadarrama, pero antes de subir la carretera que nos llevará al alto de Cotos nos encontramos con otra joya, Rascafría. En Rascafría se conforma el Lozoya de la unión de varios arroyos en el que destaca el de Angostura, que da nombre al coto más alto del Lozoya en el que aunque con repoblaciones puntuales nos encontramos con preciosas truchas autóctonas y barbos de montaña, preciosos y luchadores que también entran a mosca en los preciosos días soleados de primavera y verano. Sin duda una de las joyas de Rascafría es el Monasterio de El Paular que data del año 1390, fue la primera cartuja del Reino de Castilla, y así permaneció durante 450 años hasta que fue abandonada por la desamortización. Actualmente, desde 1954, es una abadía benedictina y alberga también un precioso hotel donde pasar el fin de semana.

puente_perdon

Junto al Monasterio el puente del Perdón construido por los monjes para sustituir uno de madera y facilitar el acceso a la fábrica de papel. El puente está frente al Monasterio de El Paular y lleva este nombre porque los reos podían apelar su sentencia por última vez y ver conmutada su condena si el tribunal lo consideraba de Justicia. Para terminar nuestra ruta recomiendo subir unos kilómetros más dirección a Cotos y desviarnos a la derecha al Mirador de los Robledos, a la sombra del Pico Peñalara contemplamos las cumbres nevadas, todo el valle del Lozoya con sus bosques de pinos y Robles. Una despida magnífica de un lugar con mucho encanto.

Zonas de pesca del Valle del Lozoya

cotos-lozoya

[box size=»large» style=»rounded» border=»full»]¿Aún no conoces el Valle del Lozoya?¡No dejes de visitarlo![/box]

 

 

 

No hay comentarios todavía

Participa en la conversación

No hay comentarios.

Anímate y se tú el que comience los comentarios de este artículo.