Sedal Asari Prestige, ¿quién da más?

por Carlos Prieto 8 de agosto de 2012 0 comments

Sin lugar a dudas, antes de redactar un informe pormenorizado de las cualidades de un determinado complemento hay que pararse a estudiar no pocos extremos. En este sentido, si bien las cañas, carretes, señuelos y múltiples enseres permiten realizar una amplia glosa de ellos, en el caso de las líneas, en cambio, el margen de maniobra queda mucho más restringido. Ahora bien, sólo cuando se lleva empleando continuamente dicho material a lo largo de los años –y con resultados más que satisfactorios–, la tarea se ve ampliamente facilitada.

¿Qué hay de nuevo, viejo?
De entrada, aunque el Asari Prestige semeje ser un recién incorporado al sinfín de accesorios elaborados para satisfacer los deseos del pescador, esta línea es de las que llevan bastantes años en circulación merced a sus prestaciones, con la salvedad de que en la actualidad recoge una variación en la presentación externa de las bobinas, como es el diseño de la pegatina que la anuncia y señala sus características a grandes rasgos. Por tal motivo, puede que algunos compañeros le hayan perdido la pista a esta fiel compañera que tanto venían empleando, mas siempre ha estado ahí, ofreciendo grandes servicios, solo que con un lavado de cara de por medio.

Mezcla de sabores
En función de las pruebas efectuadas, se puede afirmar categóricamente que éste es uno de los enseres que sin lugar a dudas merecen la pena tener un hueco en la bolsa, o bien en el bolsillo del chaleco.

En primer lugar, muestra una perfecta aptitud para ser empleada en todo tipo de técnicas de pesca, en especial a la hora de confeccionar bajos de línea, en la medida en que en torno a ella aglutina algunas de las características propias del fluorocarbono junto a las del monofilamento, algo realmente digno de mención, habida cuenta que de este modo, con respecto al primer caso podremos ofrecer nuestro reclamo desde una cierta perspectiva furtiva, mientras que, por su parte, la elasticidad compensará los fallos que el pescador pueda cometer. En resumidas cuentas, se trata de un material de gran utilidad para quienes buscan calidad a un precio contenido.

Doblemente útil
Una de las mejores aplicaciones que tiene esta línea se centra en la pesca con artificial. Y es que si bien el componente de fluorocarbono permitirá enmascarar el nexo que nos une al señuelo –mientras al mismo tiempo mantiene cierta rigidez–, la elasticidad permitirá encajar perfectamente los intempestivos tirones que podamos recibir por parte de la captura. Ahora bien, esta flexibilidad no sólo nos mostrará su provecho llegado el momento de pelear con el pez, pues cuando se produzca cualquier inesperado cierre del pick-up del carrete en el momento del lance –y que tantos señuelos se cobra a lo largo de la temporada–, se encargará de amortiguar tal bloqueo, lo que evitará que vuestro oneroso engaño parta hacia la inmensidad sin billete de vuelta.

Por otro lado, y aun cuando la empleemos para elaborar bajos en estratos rocosos, mantendrá una considerable suavidad al tacto y una gran resistencia al nudo, lo que impedirá que tengamos que reemplazarla cada poco tiempo, aspecto que se ve reforzado cuando, en esta disciplina, dicho tramo de línea se ve sometido a tensiones por ambos extremos. Y es que lo mismo que el señuelo tira de él desde un lado –cuestión que variará en función del peso que tenga–, del otro, al encontrarse el trenzado enterrado en la bobina con empeño, también lo tensará, en especial tras efectuarse el lance. Obviamente, y en lo que respecta a la pesca con cebo natural, esta operación no afecta en modo alguno a la integridad del bajo de línea, lo que nos garantiza una duración aún mayor.

Imbatible
Como hemos apuntado previamente, uno de los puntos fuertes que tiene la Asari Prestige estriba en contar con una relación calidad-precio sencillamente insuperable, cosa que por desgracia no es moneda común en muchas líneas. Por eso, antes de pensar en hacer un serio desembolso para adquirir onerosos fluorocarbonos, es más que conveniente que os hagáis al menos con una de estas bobinas, y ya veréis que la experiencia no os dejará con mal sabor de boca. De hecho, muchos pescadores que la han empleado, han pasado a renegar, si no del todo, sí parcialmente de ellos, cuestión que a más de uno de vosotros os sonará a chino mandarín, máxime cuando se nos trata de inculcar por activa, pasiva y perifrástica que es un tipo de línea que no tiene rival. En fin, algo tendrá el agua cuando tantos la bendicen.

Lo mejor

– Gran resistencia al nudo.
– Tremendamente polivalente.
– Inmejorable relación calidad/precio.

Lo peor

– Se echan de menos bobinas con mayor contenido de línea.

Y a ti, ¿a que te gustaría probar el Asari Prestige?