Pescar basses de tormenta

Pescar basses de tormenta

por 8 de junio de 2011 0 comments

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Los últimos días de mayo y estos primeros de junio están siendo más que revueltos metereológicamente. Lluvias, tormentas… algunos desean que llegue ya el verano pero, como casi todos los años, se resiste. ¿Esto detiene a un pescador? Desde luego que no, todo lo contrario, la lluvia siempre ha sido una de las mejores excusas para salir a pescar, aunque de estas casi cualquiera nos vale.

Las tormentas al aire libre me dan mucho respeto, pero al igual que vienen se van, y lo que dejan suele ser casi siempre bueno, ríos crecidos y más turbios que facilitan la pesca, así que aprovechemos el momento.

A río revuelto…

Pues sí, el dicho es cierto, recuerdo una poza en el río Verdugo en Pontevedra hace diez años, en la que nunca había sacado ningún pez y debajo del diluvio universal conseguí 13 truchas en menos de una hora. El resultado fue casi pulmonía pero siguiendo con los dichos “Sarna con gusto no pica”.

Hoy hablo de otra especie, del Bass, un pez de “embalse” pero que le encanta las entradas de los ríos y arroyos, especialmente en primavera, y son estas aguas turbias que entran rápidamente después de la tormenta la que nos da la oportunidad.

Enfadar al pez

En esos momentos el bass suele estar en su “guarida”, vegetación u obstáculo sumergido. ¡Hay que sacarlo de allí! El Bass es muy temperamental, puede aguantar en su sitio horas pero luego tiene ese arranque, esa fuerza, esa picada.

En estos días juguemos con cebos de media profundidad y colores muy vivos. Los peces artificiales o duros o blandos nos pueden dar muy buen resultado, al igual que con otros vinilos, siempre que le demos “movimiento” y le enfademos, para que se lance contra el cebo. Arrancar y parar de golpe el cebo suele ser muy efectivo.

En colores utiliza los fuertes, amarillos, naranjas…. Es su momento, en aguas claras no suelen funcionar tan bien.

Podemos pasar una muy buena jornada, pero como siempre, mucho ojo con las tormentas y no perdáis de vista algún refugio o punto de partida como vuestro coche en caso de prisas. ¡Buena pesca!

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