La charca

Para muchos aficionados a la pesca la palabra «charca» significa poco pero para otros muchos especialmente los que tenemos vínculos con Extremadura, nos trae grandes recuerdos.

Según la Real Academia de la Lengua, una charca es un «depósito algo considerable de agua, detenida en el terreno, natural o artificialmente» pequeñas lagunas artificiales en las que se aprovecha el agua de pequeños arroyos o manantiales, y que son lugares de esparcimiento y desde luego de pesca.

En una de ellas aprendí a pescar con una pequeña caña, una sencilla veleta y maíz como cebo, y allí conseguí mi primera captura una preciosa Tenca de 600 gramos; tenía 6 años pero el recuerdo es imborrable.

Veintinueve años más tarde sigo pasando alguna tarde allí, a algunos puede parecerles una pesca aburrida, pero es tan sencillo como buscar siempre diversión y nuevos retos. Yo ahora intento «aprender» a pescar a la inglesa, como todas las modalidades requiere su práctica. Yo tan sólo llevo un par de años y una docena de saldas pero la sensación es inmejorable, y ya se ha convertido en mi modalidad preferida para pescar ciprínidos, y es que en esta, como en la gran mayoría, que está a escasos cinco kilómetros de la localidad pacense de Cabeza del Buey abundan la carpa royal, común y la tenaz tenca.

Mi consejo hasta que avancen los días de calor es buscar zonas de profundidad en recodos, sondear esta y adaptar nuestro aparejo a la profundidad idónea nos llevará su tiempo pero lo notaremos en los resultados, igualmente en pesca inglesa no escatimemos de los mejores nylon, fino y resistente, y combinemos las veletas al gusto, aunque yo prefiero francamente las de tipo avon.

El 15 de mayo ya tengo reservado el día para disfrutar de uno de los pequeños rincones de pesca de los que debemos cuidar para disfrute de todos.