La importancia de elegir el lugar para la pesca de Luciopercas

por Chanquete 1 de diciembre de 2017 0 comments

La pesca de Luciopercas ha sido una de las modalidades que más ha crecido en los últimos años. Las razones son obvias, la primera su crecimiento en muchas cuencas. Teniendo claro que es una especie exótica que acaba con las poblaciones de peces autóctonos (el caso del Embalse de la Cuerda del Pozo, en el río Duero), es de los más claros.

La realidad es que tenemos Luciopercas y de gran tamaño. Un recurso pescable que muchos aprovechan todo el año, con especial énfasis en momentos como el actual, cuando llega el frío, en el que la pesca de otras especies es mucho más difícil. Aunque la pesca de luciopercas tampoco es la más fácil y tiene condicionantes importante, uno de los principales buscar y elegir el lugar adecuado para su pesca.

La importancia de la “estrategia” para la pesca de Luciopercas

La lucioperca es un pez “caprichoso”. Igual podemos concatenar una buena serie de picadas como volver con un bolo a casa. Elegir el sitio y momento adecuado, o más bien conseguir esta confluencia de circunstancias es fundamental, como también lo es tener una enorme paciencia si creemos que estamos en el lugar adecuado y vemos que aún no tenemos picadas.

El pato nos ayuda a movernos en distintas áreas buscando donde la lucioperca esté activa

Para esto, debemos encontrar las zonas de alimentación y permanecer allí tentándolas para cuando entren en actividad poder conseguir estas picadas que soñamos. Si pescamos embarcados o en pato, tenemos más opciones de encontrar el sitio adecuado, si lo hacemos de

Las preferencias de la Lucioperca a lo largo del año

Para conseguir aumentar estas posibilidades es importante decantarnos por zonas potencialmente superiores y adaptarnos a sus movimientos en estaciones:

En primavera es cuando su movimiento es más impredecible, especialmente en el momento de la freza y la posfreza, pero la cosa cambia cuando llega el calor. La lucioperca es un pez exigente en cuanto a la frescura y la calidad de las aguas con respecto al oxígeno. En verano, por tanto, busca las zonas con corrientes en los ríos o las más oxigenadas entradas de agua de los embalses, con entrada de ríos y arroyos. No vayas por tanto a reculas cerradas o zonas con poca profundidad en los embalses, si no hay entrada de agua dirígete a zonas abiertas, profundas y más oxigenadas. Además, las picadas suelen centrarse más en las primeras horas del día o últimas de la tarde, cuando el calor amaina.

Cuando llega el frío la pesca de luciopercas se activa, especialmente la de ejemplares grandes

En otoño, cuando el agua empieza a enfriarse, la lucioperca aumenta su actividad y caza más. Sale de la profundidad o de las zonas de aguas rápidas de los ríos para irse a cazaderos en áreas más someras y lentas. Eso sí, el comportamiento es más errático. El cazadero que ayer pudo sorprenderte puede no darte ninguna captura. Intenta detectarlas para moverte entre ellas, el pato será de gran ayuda. Para finalizar, el invierno es el momento de las grandes luciopercas. Ganan profundidad, pero se mueven por las áreas de freza y cazaderos, pero sin esos cambios que desesperan en el otoño. Si crees que estás en el sitio adecuado, insiste. Con paciencia conseguirás buenos resultados.