Conoce el Wooly bugger, el streamer más versátil

Conoce el Wooly bugger, el streamer más versátil

Conoce el Wooly bugger, el streamer más versátil

por 24 de febrero de 2017 0 comments

Pocas moscas hay más famosas en el mundo que la wooly bugger. Este streamer, creado especialmente para la pesca de grandes truchas en lagos o en ríos de gran corriente se ha convertido en todo un clásico en España. Este éxito, no se debe sólo en la pesca de la trucha ya que hay muchos ríos no preparados para streamers como la wooly bugger, si no porque también se ha convertido en una excelente mosca para la pesca de la carpa y del barbo.

La wooly bugger es para muchos la mosca más versátil. Para mi es bastante difícil de afirmar rotundamente pero si la comparto con otras clásicas como la adams parachute o la baetis rodhani, aunque si es cierto que con la ventaja de poder usarla en la pesca de ciprínidos a mosca. La wooly bugger la utilizo generalmente en ríos con corriente, en este caso especialmente en las crecidas de abril y mayo,  y por supuesto en embalses casi toda la temporada de pesca. Para el barbo es una gran mosca para casi toda la temporada con diferentes variaciones en el color, que sólo prescindo de ella en final del verano y principios de otoño, cuando la hormiga alada es la protagonista. Para la carpa el atractivo está sin duda en su tamaño y visibilidad.

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Wooly Bugger con cabeza dorada y color tradicional negro

¿A qué imita el Wooly Bugger?

Si en la pesca a mosca tenemos por un lado imitaciones muy reales y por otro, las fantasía, la wooly bugger estaría en esta última categoría. El “bicho lanudo” no imita en concreto a ningún insecto pero se asemeja a muchos, más con las distintas variedades o colores que se pueden construir, en general, grandes insectos que se mueven por la superficie del agua.

El montaje es sencillo, sobre un anzuelo con tija larga, atamos un abundante mechón de tiras de marabú como cola que combinaremos con su cuerpo de lana o dubbing. La cola no debe ser excesivamente larga para facilitar la picada. Sobre los colores, los más clásicos combinan colores más oscuros (negro en la cola marrones y olivas en el cuerpo, con gris el palmer) ahora hay modelos de muchos más colores entre las que destacan todo tipo de marrones, anaranjados o rojizos. El resultado es una mosca vistosa, con un movimiento ondulante al mínimo tirón que atrae a peces de buen tamaño.

Cómo usar la wooly bugger

Lo más normal es hacerlo de forma lastrada y con líneas de hundimiento lento, con lo que no veremos como en moscas secas en superficie las tomadas de los peces emergiendo en la búsqueda de su presa. El lastre se centra en la cabeza, existiendo muchas wooly bugger con cabeza dorada. Si pescamos en aguas tranquilas se usan líneas sumergidas, y un bajo de línea relativamente corto, con un ligero plomeado ya que el agua no nos ofrecerá resistencia. Si lo hacemos en ríos con amplia corriente, el plomeado y el bajo de línea han de ser mayores.

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Trucha capturada con una Wooly Bugger

Modelos y éxito

La wooly bugger no tiene la larga historia de otras moscas como la Adams. Aunque hay prototipos que se usaron en Estados Unidos en los años 70-80, su gran éxito y extensión es ya de este siglo. Pero si su aceptación ha sido rápida, las variaciones de la misma no tardaron en llegar, como la dog nobbler, la wooly en amarillo o la “Russell” blessing.

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Variación de Wooly Bugger en oliva

Su éxito está en que su construcción es sencilla, la técnica igualmente es fácil, basta con elegir el lastrado y longitud de línea ideal para los distintos entornos donde la utilicemos. En el caso de la carpa y el barbo su elección es sencilla, sólo debemos ver los colores que más funcionen. En el caso de la trucha es muy útil cuando otras imitaciones no funcionan y se convierte en esa arma secreta que nos puede salvar una jornada de pesca.

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