Cañas de pesca

Caña Rapture Intruder 3002 XH. Pasando revista a una opción apta para jugar dos barajas

por Carlos Prieto 7 de febrero de 2017 0 comments

La caña Rapture Intruder 3002 XH, es una de la inabarcable oferta de cañas existente en el mercado dificulta considerablemente la tarea de escoger una vara que concuerde con nuestras necesidades, hecho que se acentúa cuando además se desconoce cuál es el comportamiento real que aquéllas pueden ofrecer. Y es que la falta de datos de campo permite que gran parte de ellas pasen frente a nosotros sin recibir la menor atención, aun cuando en principio aparenten disponer de sobradas facultades para dar un servicio satisfactorio.

Semejante contexto posibilita que en ocasiones compremos a ciegas, razón por la cual es lógico que tras la adquisición crucemos los dedos para que el producto nos satisfaga, o que en el peor de los casos podamos acomodarnos a las circunstancias, extremo éste que a la larga es difícil que suceda puesto que cada cual tiene sus filias y sus fobias. Por eso, y con el fin de arrojar luz, en adelante vamos a desgranar los aspectos principales de la caña Rapture Intruder 3002 XH, una caña que hemos tenido oportunidad de probar a lo largo de dos temporadas, y con la que no hubo miramientos a la hora de intentar sacar a relucir su verdadero rostro.

Tomando contacto con la caña Rapture Intruder 3002 XH

A decir verdad, existen numerosas cañas que decepcionan en cuanto se las tienta someramente, o cuando se testa grosso modo el C. W. que determina la firma sin necesidad siquiera de adjuntar carrete y señuelo. Sí, muy bonitas en términos de componentes de primera categoría, pero el comportamiento del blank deja que desear, lo que hace que esas todas esas medallas no sirvan para nada. Ejemplos de ello hay a mansalva, incluso en la principal firma que tradicionalmente viene comiéndose gran parte de la tarta del mercado ibérico de la pesca deportiva. No obstante, otras como la Rapture Intruder 3002XH, sin portar unas hechuras pródigas en detalles con los que recrearse, revelan una sobriedad que no defrauda a la larga, una sensación que incluso se percibe desde que se las saca de la funda.

En el caso que nos atañe, el blank es de color marrón oscuro, detalle que no viene a aportar un aspecto digno de utilidad para el pescador hasta que se comprueba su notable grosor. Y es que la presente -y muy desconocida- referencia fue escogida para encarar situaciones en las que el mar y el terreno se combinan para dificultar la pesca, momentos en los cuales no hay sitio para monsergas, y cumple. Vaya si cumple.

La caña Rapture Intruder 3002 XH suma y sigue

Sin entrar a valorar la procedencia y módulo del blank, lo cierto es que al primer zarandeo queda de manifiesto que estamos ante una caña de tres metros y dos tramos muy dura y potente, poseedora de una acción muy real respecto a la declarada por su fabricante. En este sentido, la sección principal muestra una considerable fortaleza, en tanto la de puntera ofrece una suave progresividad sin que ello implique perder resistencia. No, en ningún caso nos hallamos ante una opción fácil de hacer sudar. De hecho, apenas se inmuta a la hora de lanzar chivos de 70 gramos, que es el peso máximo proyectado en infinidad de ocasiones, lo cual constituye un punto a su favor, pero al mismo tiempo no cierra la posibilidad de utilizar engaños de menor entidad. Por eso la presente vara se erige en un interesante comodín cuando en principio no sabemos a qué carta quedarnos, ya sea por la variabilidad de las circunstancias de pesca o de los emplazamientos en que se practica, algo que tiene su reflejo cuando investigamos puestas desconocidas, e igual no es preciso recurrir a varas largas para abordarlas bajo unas mínimas garantías.

Rapture Intruder 3002 X sencilla, pero eficaz

A decir verdad, cuando se ha apuntado que se han exprimido las posibilidades de esta caña, no es a título gratuito. Además, pese a habérsele prestado escasa atención, el anillado continua incólume y apenas se aprecian síntomas de corrosión en el bastidor que en nada afectan al comportamiento de la caña, más allá de la mera cuestión estética que esto pueda suponer para el pescador. Asimismo, el carácter «SiC» de la cerámica de las anillas mono, bi y tripata dispuestas por la casa igualmente se muestra competente… aunque unas KWAG desde luego que le irían de perlas para dar un salto de calidad. Por último, la longitud del talón revestido de corcho es adecuada a la hora de cargar la caña -en torno a los 45 centímetros-, con lo cual nos hallaremos cómodos en este orden de cosas, así como de cara a evitar líos con la ropa cuando luego pretendemos situar la vara a la altura de la cadera, un detalle por otra parte del que pecan no pocas referencias.

Rapture una caña que no defrauda

Sin lugar a dudas, la Rapture Intruder 3002XH no es una de esas cañas que enamoran al primer golpe de vista en base a su apariencia externa, pero tampoco es de las que engañan a quienes depositan su confianza en ella. Pergeñada para encarar situaciones en las que conviene establecer una prudencial distancia de seguridad respecto del mar, su sobriedad no esconde parquedad de facultades y sí una considerable potencia, al tiempo que dispone de un precio que la convierten en una opción sumamente interesante para quienes consideran que la lubina, aun cuando lo merece todo, no precisa de gastos desmedidos para encarar su pesca. Ahí es nada…