Señuelo María La Segunda, un clásico invencible

A pesar de que todos los amantes del spinning tenemos una gran variedad de señuelos en nuestras cajas, a la hora de anudar uno de ellos optamos por nuestros preferidos, los cuales han mostrado toda su eficacia durante muchos años. Por más que salgan al mercado nuevos y novedosos modelos, estos jamás pasarán de moda, dada su alta efectividad.

Uno de ellos es el señuelo La Segunda de María, una marca con muchos lustros a sus espaldas, especializada en agua salada. Y este modelo en concreto es el favorito de muchos aficionados, en especial para pescar la lubina.

La segunda es un señuelo al que recurrimos cuando otros fallan porque sabemos que podrá arrancar esa ansiada picada. También podemos utilizarlo como primera opción, ya que este clásico reúne una serie de condiciones para que no haya perdido un ápice de su efectividad lo largo de tantos años.

Veamos al detalle este artificial para poder afirmar que estamos ante un gran engaño.

Características

– Tamaños y pesos:
• El de 11cm y 24g es ideal para la lubina.
• El de 14cm y 36g es perfecto para especies mayores como el bonito, la anjova o la barracuda.

– Transferencia de pesos: por bolas, facilitando el lance y provocando un atractivo efecto sonajero.

– Colores:

• MA, MI, AY: especiales para aguas limpias.
• FRH: ideal para la noche y entre dos luces, sobretodo en invierno.
• GRF: muy efectivo durante noche y momentos crepusculares, sobretodo con aguas turbias.

En acción de pesca

– Lance: Excelente. Gracias su sistema de transferencia por bolas, alcanzamos distancias muy elevadas.

– Natación: Se caracteriza por su movimiento woobling que realiza gracias a su forma aplatanada, llegando a profundizar sobre el metro o metro y medio. Técnicamente no es un señuelo suspending, pero al efectuar paradas, asciende tan despacio que prácticamente queda suspendido.

A favor: Lance. Efectividad de sus colores. Precio asequible. Movimiento.
En contra: Anzuelos triples poco resistentes al agua salada.

Conclusión

Definitivamente estamos ante un clásico que es un número uno, repleto de virtudes para la pesca de la lubina. Lo lanzaremos a distancias inimaginables comparándolo con otros modelos de su mismo tamaño y además aguanta mucha mar.

Sus colores son muy efectivos y en particular, la coloración GFR ha sacado y sacará muchos ejemplares de lubina en las peores circunstancias.

Después de utilizarlo, tan solo deberemos darle un baño de agua dulce tras su uso para prolongar la vida de sus anzuelos triples.

Además, lo podemos conseguir a un precio muy razonable dada su efectividad.