La pesca del aligote, buscando nuevas experiencias

La pesca del aligote, buscando nuevas experiencias

La pesca del aligote, buscando nuevas experiencias

por 3 de julio de 2013 3 comments

Doradas, sargos, lubinas,… Seguro que sois muchos los que habéis capturado alguna vez estas especies. Pero existen otras, que aunque son menos conocidas, no debemos olvidarnos de ellas porque nos pueden ofrecer grandes jornadas de pesca.

Hoy le toca el turno al aligote, un pez que se mueve sobre todo en los fondos arenosos y rocosos de nuestro litoral en época estival.

Consejos para la pesca del aligoteSus características

El aligote pertenece a la familia de los espáridos. Su cuerpo es aplanado por los lados, tiene forma oval y una fuerte cabeza. La aleta dorsal muestra de doce a trece radios espinosos, y la aleta anal tiene tres radios espinosos seguidos de nueve o diez radios blandos.

Suele ser de color pardo o rosado, acompañado de una mancha roja oscura en el borde superior del interior de las pectorales. La cavidad bucal es dorada o anaranjada. Alcanza una talla de 35 centímetros, aunque lo normal es que se sitúe entre 20 y 25 centímetros. Es un pez graso y puede sobrepasar el kilo de peso.

Como señalaba, esta especie suele vivir en fondos de roca, algas y arena, aunque también es habitual encontrarlo delante de puertos y muelles, cerca de cabos, puntas, promontorios y escolleras. Sobre todo lo podrás encontrar en los desniveles de las rocas porque es allí donde busca principalmente su comida.

Es asiduo a las aguas del Atlántico y del Mediterráneo aunque también podemos verlos en el Cantábrico. ¡Está muy cerca de ti!

Para comer…

El aligote es bastante fácil de complacer si le regalas como cebo sardina, calamar, gusano americano, quisquilla, gamba pelada, pan, queso, larvas de mosca, trozos de caballa, calamar, así como anchoa fresca y salada. Cualquiera de estos cebos hará que el aligote caiga rendido a tus pies.

¿Cómo enamorarlo?

En cuanto a la técnica de pesca deportiva para pescar el aligote, lo aconsejable es a la inglesa, con boya o a fondo. Las condiciones ideales son mar encrespado o menguado tras una marejada, y también en calma, señalando otros peces su presencia con característicos cercos sobre la superficie. El aligote vive en grandes bancos y por tanto, si pescas de la forma correcta, efectuarás muchas capturas en una sola jornada, sobre todo en verano.

Si sales a pescar en barco y hay varios pescadores en la borda, es conveniente que siempre uno tenga los aparejos en el agua, ya que así los mantendrás debajo de tu embarcación. Los empezarás a encontrar a partir de los 20 metros, siendo más abundantes a partir de los 50 metros (aunque puede llegar a vivir hasta los 200 metros de profundidad).

Los ejemplares más jóvenes se aproximan a la costa de abril a octubre, y se captura en las primeras o en las últimas horas del día, cerca de la superficie.

Aunque también es una presa frecuente para los aficionados que practican el lance pesado en zonas de cierta profundidad, como la punta de espigones, muelles, etc.

5 trucos para su pesca

1. Respecto a su pesca, puedes utilizar las mismas técnicas que para el besugo, es decir, aparejos de fondo, con varios anzuelos, y cebados con trozos de peces, de calamares,…
2. Parece ser que también sigue las pautas del besugo en cuanto a la búsqueda de mayores profundidades con la edad, por lo que los ejemplares de cierta talla los encontraremos generalmente en fondos que superan la veintena de metros.
3. Evita los anzuelos muy grandes, e intenta que estén afilados.
4. ¡Ojo!, cuando notes su picada de forma tímida debes bajar la puntera de la caña y levantarla de nuevo, lo que hará que ataquen el cebo de forma decidida.
5. Es importante macizar abundantemente, y se recomienda hacerlo con pan ablandado en salmuera de boquerón o mezclado con pasta de boquerón y luego sumergido en agua marina.

Coordenadas peZcaleras: aligotes en Isla Ízaro

Si quieres estrenar tu relación con el aligote de la forma más aconsejable, la isla de Ízaro es tu lugar. Esta isla del mar Cantábrico, situada en la costa de Vizcaya, pertenece a la villa de Bermeo. La isla ocupa el centro de la desembocadura de la ría de Mundaca y se encuentra flanqueada por los cabos de Ogoño y Machichaco.

En tierra

En la explanada superior de esta isla se erigió un convento franciscano que fue arrasado por Sir Francis Drake en el siglo XVI, y a día de hoy sólo quedan vestigios. Ízaro es una verdadera colonia de aves marinas, siendo la especie más común la gaviota argéntea, aunque también anidan la gaviota sombría o el paíño común, las garcetas y los cormoranes. En épocas anteriores se criaban en ella conejos (seguramente llevados por los frailes del convento), y en el siglo XIX se arrendaba la isla para que pastaran las ovejas. En la actualidad está restringido su acceso, al ser junto con la ría de Urdaibai, zona ecológica protegida.

[box][quote]Es asiduo a aguas del Océano Atlántico y del Mediterráneo, aunque también podemos darles captura en el Cantábrico. ¡Están más cerca de lo que crees de ti! [/quote][/box]

En los alrededores

Sus costas y alrededores son zonas de buceo y pesca, en las cuales, durante la época estival, podrás ver gran cantidad de pequeñas embarcaciones de pesca deportiva con puerto en Mundaca, Pedernales y Bermeo.

Si necesitas más información, la podrás encontrar en el siguiente enlace: Turismo de Villa Bermeo.

¿Te atreves con la pesca del aligote? ¿Has capturado alguna vez uno de estos ejemplares?

3 Comentarios

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  1. Toni Martínez
    #1 Toni Martínez 3 julio, 2013, 13:25

    Desde luego tenemos infinidad de especies a cada cual más deportiva. Buen artículo.

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