Los ríos salmoneros de España (XV): El salmón en el río Esva, cuando el hombre puede ayudar a la recuperación

Los ríos salmoneros de España (XV): El salmón en el río Esva, cuando el hombre puede ayudar a la recuperación

Los ríos salmoneros de España (XV): El salmón en el río Esva, cuando el hombre puede ayudar a la recuperación

por 14 de febrero de 2016 0 comments

El rio Esva o Canero es uno de los cauces que debemos destacar, no por los 32 salmones, casi la mitad en el coto de Piedras Blancas, pescados en el 2015, sino porque a diferencia de otros en los que el hombre acabó con el salmón, este si regresó gracias a su labor, aunque la dejadez y algunos problemas pueden volver a condenarle de nuevo.

La cuenca del Esva, o Canero, conforma una cuenca bastante ramificada con abundantes tributarios que le confiere una extensión considerable de 464 km2. Se considera propiamente al río Esva a partir de la unión de los ríos Bárcena y Navelgas, cerca del pueblo de Ese de Calleras (Tineo). El primero nace en las vertientes de Fonfaraón en el concejo de Tineo, pasa por Bustiello y Bárcena del Monasterio, recibe por su derecha al río Obona y se une al de Navelgas. Este último nace en la parroquia de Rellanos y tras pasar por Navelgas recibe al río Yervo por su derecha y se une con el Bárcena, formando el Esva propiamente dicho. A partir de su unión discurre por el concejo de Valdés, desembocando en el mar Cantábrico por la playa de la Cueva tras pasar por Paredes, Brieves, Trevías y Canero.

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Tramo medio-alto del río Esva

El salmón en el río Esva se encuentra con dos obstáculos importantes artificiales, las presas de Casielles, en el límite del Coto de Piedra Blanca, que sirven para derivar agua hacia la piscifactoría. Aguas arriba, en las inmediaciones de Brieves, existe otra presa, que al igual que la anterior está provista de escala salmonera que facilita el ascenso de los peces.

El salmón del río Esva, un potencial a preservar

Las mejores zonas para desove las poseen los salmones aguas arriba de San Pedro de Paredes hasta la zona de Calleras, existiendo también en la parte baja del río algunos frezaderos, más señalados en la zona de Brieves.

Pero lo más importante del salmón en el río Esva, es que hace algo más de medio siglo se recuperó de su desaparición. No fue la industrialización que afectó a muchos ríos del norte, especialmente en Vizcaya y Guipúzcoa sino un fenómeno natural que taponó la entrada del río.

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Desembocadura del río Esva, con la apertura realizada en los 50 que volvió a permitir la migración del salmón. Antes desembocaba por filtración de la playa

El salmón del Esva, que había desaparecido de esta cuenca a principios del siglo XX, volvió a colonizarla en base a las repoblaciones que se efectuaron durante los años 50 y a la apertura artificial de la barra de arena que hacía que el río desembocase en el mar por filtración y, por tanto, evitaba la entrada de peces migradores. El origen de los salmones empleados en la repoblación del Esva es muy discutido y no parece estar claro; existen diferentes versiones respecto a su procedencia, aunque sí que parece claro que se trataba de peces de una o más cuencas españolas.

Hoy ya está aclimatado y aunque recibe ayuda de constantes repoblaciones, el peligro vuelve a ser el hombre.

Implicación de unos, la lacra del furtivismo de otros

El pasado junio, la Guardía retiró redes ilegales para salmones que habían sido colocadas en el coto salmonero Piedra Blanca, cerca de la zona de precintaje. Pero no es el único caso, en prensa el pasado verano se atestiguó de testimonios de matanzas indiscriminadas y a fusil. Por ello, los pescadores de la zona piden más vigilancia y mayor implicación de las instituciones con el río Esva que empezaría con un incremento de la plantilla de guardas que mantiene el mismo número de trabajadores desde hace años.

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Retirada de redes ilegales en el río Esva

En el mes de julio, el club de pesca «La Socala» se unió a la Sociedad de Pescadores «Las Mestas del Narcea» para promover otra actividad con el fin de recuperar el salmón en el río. En este caso, soltaron 35.000 alevines en distintos tramos del río Esva. Estos peces fueron criados en el centro que mantiene la segunda sociedad con salmones capturados en el río Esva para garantizar su retorno a esta cuenca salmoneras cuando se conviertan en adultos.

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