Carpfishing

Cómo clavar las carpas a fondo

por Josan Illescas 30 de octubre de 2015 0 comments

Antes que sigáis leyendo os he de informar que lo que voy a exponer en este artículo a base de letras, palabras y frases más o menos correctamente enlazadas y que tengan un cierto sentido, no ya literario, sino práctico, didáctico y entendible, es que, para quien no sea muy amante de la lectura, en el vídeo que acompaña a esta entrada digo lo mismo, aunque peor, ya que Dios no me ha llamado por el difícil mundo de la oratoria, pero creo que me sabré hacer entender, que no es poco, además de aparecer en el mismo unos cuantos momentos en acción de pesca que harán de confirmación a lo que apunto por escrito o de palabra.

Modalidades de pesca para pesca carpa

En la pesca de carpas a fondo vamos a incluir varias modalidades, unas existentes, incluso reguladas por su correspondiente normativa en los concursos que de las mismas se celebran, y un par cuya base es la misma, pero que su denominación es una invención, quizá absurda, de alguno poco diestro seguramente en las técnicas “oficiales” de pesca a fondo y que no tiene otra manera de enmascarar su falta de habilidad y conocimientos en la pesca más ortodoxa, aunque soy de la opinión que la pesca nunca ha de someterse a reglas estrictas, excepto una, por supuesto, que sería el obligado y exquisito respeto y cuidado con que debemos tratar a los peces:

• Pesca a fondo tradicional: plomo y bajo con anzuelo.
• Feeder (pesca a fondo con cebador).
• Carpfishing (pesca de carpas grandes).
• Carpfishing agreste (objeto de próximo análisis si algún lector lo desea).
• Feeder rupestre (igual que la anterior “técnica”)

Forma de clavar

Así que, nos centraremos en las tres reales y dejaremos, por ahora, las dos ficticias: en la pesca a fondo tradicional vamos a pescar con un plomo, el cebo descansando en el fondo y las cañas en posición vertical ancladas a dos “pinchos” o soportes o en un trípode o en cualquier otro artilugio en el que podamos hacer una pesca con las cañas casi en posición horizontal. La forma de clavar a estos ciprínidos es la siguiente: ninguna.

La carpa, cuando la caña se comba por la picada o nos empieza a sacar hilo del carrete, ya lleva el anzuelo en la boca y ya está clavada, sólo teniendo el pescador que cogerla, sujetarla e iniciar la lucha con el pez regulando la tensión del freno del carrete según la necesidad del momento. Es más, el clavar las carpas, el dar el cachete es, me atrevería a decir sobre todo si es fuerte en demasía, contraproducente cuando estamos pescando carpas de pequeño tamaño (hasta unos dos kilos más o menos), ya que éstas no tienen la boca tan desarrollada como las grandes, y lo más que lograremos es que se les desgarre y perdamos así la captura produciendo un daño innecesario al pez.

Pesca al feeder o con cebador

En la pesca al feeder o con cebador normalmente pescaremos con cañas mucho más sensibles y ligeras que las que utilizaremos a fondo tradicional, detectando la picada en la puntera. Algunos expertos en esta disciplina afirman que siempre hay que clavar al pez, aunque otros, entre los que me incluyo —aunque de nuevo matizo mi lejanía en esta pesca a la pericia más excelsa — creemos que cuando el puntal de la caña está moviéndose al son de toquecitos ligeros es señal que el pez está comiendo o tocando nuestro cebo sin atreverse a engullirlo, por lo que en este preciso momento es conveniente pegar un ligero cachete a la caña, las cuales, esto es necesario matizarlo, pese a la sensibilidad de la punta, son potentes, cualidad necesaria para lanzar cebadores de cierto peso, por lo que este leve gesto clavará sobradamente el anzuelo en la boca del pez. Si el puntal  pega un tirón seco y mantenido, el pez está clavado y no es necesario cachete alguno. Vídeos he llegado a ver en los que algún pescador practicando esta técnica pegaban tan brutal y virulenta clavada que cabría hasta la posibilidad de que “al pez se le saliera la raspa por la boca”. Algo monstruoso, desmesurado. Un cachete ligero sólo cuando es necesario (toquecitos sutiles del pez) será más que suficiente.

Carpfishing

El carpfishing sí admite más una forma de clavar las carpas más rotunda y enérgica debido a que se trata de peces grandes y éstos tienen más desarrollada la boca, con labios fuertes y carnosos, y difícilmente se la desgarraremos a la hora de clavar, aunque, como en las dos anteriores modalidades, cuando el pez empieza a sacar hilo del carrete normalmente ya va clavado, aunque no está demás, sobre todo si pescamos a largas distancias (unos 70 metros, más o menos, en adelante) que peguemos un cachete, nunca exageradamente fuerte, para así asegurar el clavar al pez en caso que ya no lo estuviera, que es dudable.

Resumiendo, clavar las carpas en la pesca a fondo sí, pero sólo cuando es necesario y sin una fuerza desproporcionada. Más templanza que violencia. Norma también aplicable, por otro lado, a nuestra vida cotidiana.