Técnicas de pesca

5 consejos para pescar un black bass en verano

por Antonio Gallardo 18 de agosto de 2011 11 comments

Reconozco que con el black bass tengo una verdadera relación de amor-odio. Quizá odio no es la palabra adecuada y es amor-desesperación. No conozco un pez más terco que el bass y delante tienen a un pescador que tozudo es un rato. Aun así, la mayoría de las veces gana el pez.

Ya son muchas las ocasiones en las que paseando por la orilla de Orellana o del Zújar, veo un precioso black bass de dos a tres kilos, tan tranquilo, detrás de ese árbol hundido o cualquier obstáculo flotante, como diciéndote a gritos “péscame”. Pues allá voy, lanzo cebo. No se inmuta. Cambio una y otra vez. Se lo pongo delante de sus ojitos y nada, ¡que no se mueve! Sigo probando y probando, arranca… pero no. Se queda a medio camino como diciéndote: “¡esta es de mosqueo!”. Así que muchas veces arrojas la caña al suelo y te vas, sin dejar de pensar: “tranquilo que algún día serás mío”.

En otras ocasiones, la perseverancia tiene su recompensa. Pero no deja de ser cierto que pescar black bass en verano, en épocas ya avanzadas como la actual, con mucho calor, la inactividad del pez es mucho mayor y por tanto más difícil pescarlo. Por eso os animo a que sigáis unos pequeños consejos:

Pescar a primera hora de la mañana y última de la tarde:

como a nosotros, al bass no le gustan los momentos de gran calor. Hasta las 11 de la mañana o desde las 19:00-19:30 horas tiene más actividad y ganas de enganchar nuestro cebo.

Usar la orilla de sombra del embalse:

no sólo por el calor para pez y pescador, sino porque en las zonas sombrías será donde encontraremos más oportunidades para su pesca.

Cebos de media profundidad o de fondo:

el pasado domingo después de un sábado triunfal a mosca en un coto de trucha, probé cerca de mi casa a mosca con el bass. De la montaña a la meseta hay 10 grados de temperatura de diferencia y ni un black bass olisqueó mis preciosas streamers. Es época de actuar casi a fondo o a media profundidad, porque el bass que reposa allí lo verá más cerca y le dará “menos pereza”.

Provocar:

es pleno verano y no acaban de salir de su freza, por lo que los peces suelen estar “bien nutridos” y no tienen la necesidad de lanzarse a cualquier cebo, pero sí contamos con su instinto territorial, por lo que si le provocamos con una buena imitación de pez puede que se lance rápidamente a por ella por osar a invadir su zona.

Pescar en embarcación:

a veces no queda más remedio que buscar aguas muy profundas y eso sólo lo podemos hacer desde embarcación. El kayak es una alternativa cada vez mejor, por transporte y comodidad.